Dos clientes del restaurante indio Kismot, en Edimburgo (Escocia), tuvieron que ser ingresados en el hospital después de probar Killer Kismot, que sus creadores definen como el curry “más picante del mundo”.La desgustación se produjo durante un concurso que cada año realiza este local, en el que da a probar a los clientes la “especialidad de la casa”, cocinada no solo con los ingredientes picantes habituales, sino también con unos aderezos procedentes de Sudamérica que definen como “secretos”, y que hacen al plato aún más fuerte.
En esta ocasión, sin embargo, dos de los participantes en la degustación, el ganador y el subcampeón, comenzaron a sentir fuertes dolores en el estómago y cayeron al suelo retorcidos de dolor. Todo ello, por supuesto, después de haber ingerido el plato en apenas unos segundos.
“Sentí como si una sierra mecánica impregnada de guindillas estuviera atravesando mi estómago. He aprendido la lección y nunca lo volveré a hacer. De hecho, he decidido suprimir definitivamente el picante de mi dieta”, explicó Curie Kim, segundo clasificado.
Los organizadores aseguran que no tienen ninguna responsabilidad en lo ocurrido, y se acogen a que los participantes son conscientes cuando participan de los riesgos que están asumiendo, según informó el periódico escocés Daily Record.
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